Desde aquí desde mi casa veo la playa vacía, ya lo estaba hace unos días, ahora está llena de lluvia, ya no suenan las guitarras y el verano nos ha dejado, llevándose sus festivales.
Desde la mística isla de San Simón hasta los metálicos rifts que hicieron vibrar las melenas de los visitantes de Viveiro, degustando por el camino un buen vino de la Ribeira Sacra, hemos disfrutado de la música de los doce festivales impulsados por la Xunta de Galicia a través de la marca FestGalicia.
Paladeamos todavía el buen sabor de boca que nos han dejado estos festivales. Además de música la marca promueve que se desarrollen actividades paralelas dentro de los recintos, implicando directamente a los habitantes y negocios de la zona donde se celebran.
Cientos han sido los que nos visitan ya no solo por nuestras caribeñas playas, sino por eventos culturales de calidad, que ya desde hace tiempo luchan por que las mujeres también puedan disfrutar de los espacios públicos libres de miedo.
Una de esas actividades ha sido la de educar y concienciar en la igualdad, el respeto y la libertad de todas las personas, como la campaña de la Xunta Agresión OFF, digo non a violencia sexual.
Con la misma alegría que pena, este verano vimos cómo se instalaron casetas moradas en los recintos de los festivales del FestGalicia.
Alegría por comprobar in situ iniciativas que han puesto el foco más allá de las mujeres, organizando necesarios talleres para concienciar a la sociedad en general sobre la condena a la violencia sexual. Por si los árboles no dejaban ver el bosque, voluntarios recorrían el recinto informando donde se encontraban las casetas moradas informativos y para quienes aun así seguían viendo solo los árboles, se proyectaron vídeos en las pantallas de los escenarios reforzando tan importante mensaje por medio del estímulo visual propio de esta era de información rápida.
Pena por comprobar que inexplicablemente todavía es necesario concienciar a muchos perezosos a la hora de condenar la violencia de género y la violencia sexual.
Lo que no pasa en tu Smartphone no existe en el mundo. La iniciativa Agresión OFF cuenta con una App con un decálogo contra la Violencia de Género que recuerda que las agresiones y los abusos sexuales son un delito, que los festivales también son de la mujeres, que ningún outfit es justificación de nada,… En definitiva, que No es No! sin importar el momento y la forma en que se diga.
Aunque no debía ser necesario, queremos recordar a todas aquellas que habéis sufrido algún tipo de violencia sexista, que solo el violento es culpable de su violencia.
Que nunca más exista el miedo por ser mujer.